martes, noviembre 14, 2006

¿Te cae?

Cuando la frase: “Ya no queremos escribir realismo mágico”, se convierte en una de las máximas verdades de "la vanguardia", es momento de comenzar a dudar de todo…

Es cierto que los estridentistas lanzaron su manifiesto al grito de “¡Viva el mole de guajolote!” (frase célebre que hizo a los “contemporáneos” llorar de la risa), pero en el caso del estridentismo, Maples Arce sabía, por lo menos, que la batalla estaba perdida incluso antes de comenzarla.

Me temo que, muchos años después, la “nueva vanguardia” tiene más que ver con asuntos editoriales y de difusión que con la misma literatura.

“Creo que lo mejor que nos dejó el movimiento (y seguro estás de acuerdo conmigo, Nacho) fue una gran amistad”.

Dice el conferencista ante la conmoción y la sorpresa del público asistente (creo que hasta hubo llanto y kleenex que pasaban de mano en mano).

. Papel para llenar cuartillas y cuartillas con un manifiesto de vanguardia: 200 pesos.
. Cascabeles para hacer ruido en la arena con múltiples comunicados de prensa: 1, 500 pesos.
. Viaje a España para proclamar (como Neil Armstrong) que se ha conquistado la tierra prometida: 10, 000 pesos.

Que al final de TODO, te quede una bonita (y muy fructífera) amistad, que puedes describir con lujo de detalle en medio de una conferencia: ¡No tiene precio!

“La verdad es que fuimos un poco soberbios (¿no crees Nacho?) pero queríamos dejar bien claro que sólo García Márquez puede ser García Márquez”.

¿Te cae? Es el momento de la ovación de pie: clap, clap, clap… Perdón, quiero decir: crack, crack, crack.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Pero claro !! Si seguro todos tenian ojo remi y hasta hay un video (sin sonido)para la posteridad, me encanta, lo resumiste todo en el título...

Mis palabras me delatan dijo...

Al haber estado presente en la ponencia, y después de leer lo que escribiste se me escapó, inevitablemente, un: ¡No mames, qué cagado!

A mí, en particular, lo que más me divirtió fue la actitud de encabronamiento de los conferencistas ante la literatura "light", la cual, según estos cuadrumanos, querían vencer con un movimiento inteligente que no menospreciara al lector. Me dio, en ese momento, un terrible miedo de convertirme en alguien como ellos (más aún cuando el ponderado nacho es egresó de nuestra casa de estudios).

A propósito, me pasaste mal tu mail, Arturo.

Anónimo dijo...

igual y fue intencional eso del mail no?... :D